Vamos a hablar un poco sobre esta patología digestiva tan común como es el estreñimiento y, mal normalizada. Causas y algunos consejos.
¿Qué es el estreñimiento?
La OMS (Organización Mundial de la Salud) y el GEMD (Grupo Español de Motilidad Digestiva), definen al estreñimiento como la realización de menos de tres deposiciones a la semana. La frecuencia considerada como «normal» en ir de vientre y en el ritmo se sitúa entre 3 deposiciones al día y un mínimo de 3 a la semana (sí, es un rango amplio); sin que dicha deposición suponga un esfuerzo excesivo, heces muy duras o tener sensación de evacuación incompleta.
Tipos y causas más frecuentes
El estreñimiento es un síntoma digestivo o patología muy común que se relaciona principalmente con malos hábitos de estilo de vida. Pero también es cierto que se puede desarrollar en alguna situaciones puntuales como viajes, etapas como durante el embarazo, la toma de algunos fármacos (por ejemplo los suplementos de hierro, etc.).
Aún existiendo algunos tipos de estreñimiento, el más común es el estreñimiento crónico, que se produce principalmente por:
- Alimentación baja en fibra.
- Bajo aporte de agua al día.
- Sedentarismo
- Como consecuencia de otras patologías como diabetes, hipotiroidismo, cáncer de colon, transtorno anorectal o del suelo pélvico, toma de fármacos como suplementos de hierro, calcio, algunos antidepresivos, antiácidos, etc.
Un tránsito intestinal lento también podría ser una de las causas de estreñimiento. Este tránsito es el tiempo que tardan los alimentos desde que los ingerimos hasta que los expulsamos por el ano. Unos buenos hábitos alimentarios, un buen aporte hídrico, la práctica de ejercicio de forma habitual, no «aguantarse» las ganas de ir al baño y establecer rutinas para que el cuerpo se acostumbre a evacuar; pueden ser algunos de tus grandes aliados para mejorar tu tránsito intestinal.
Recomendaciones alimentarias para el estreñimiento
Una alimentación rica en fibra puede ayudar a mejorar tu estreñimiento. Para ello, será importante que tu base alimentaria esté formada por:
- Fruta, verdura y hortalizas.
- Legumbres y cereales integrales.
- Probióticos como el chucrut, la kombucha, el yogur o el kéfir (avorecerán que la flora intestinal esté saludable).
- Un buen aporte de agua al día.
- Priorizar por el consumo de aceite de oliva virgen extra como grasa principal en la dieta.
Evitar alimentos procesados como pan refinado o de molde, galletas, bollería, embutidos procesados, alimentos ricos en aúcares añadido y grasas de mala calidad, etc. En períodos de estreñimiento sería recomendable evitar el consumo de alimentos más astringentes (arroz blanco, té, plátano verde, manzana sin piel, etc.).
¿Y los laxantes?
El consumo de laxantes no solucionará el estreñimiento a largo plazo, y puede tener efectos secundarios como desequilibrio de electrolitos por diarrea o daños en el intestino. Además, pueden producir que el organismo se acostumbre a ellos y por lo tanto, el estreñimiento se haga más crónico.Los laxantes se deben tomar sólo si un médico los prescribe valorando antes cada caso de forma individualizada.
Espero que esta entrada al blog te sea de utilidad. Pero recuerda que cualquier cambio en tu alimentación tendría que ser supervisado por un profesional dietista-nutricionista.
Si quieres mejorar tu estreñimiento y quieres saber cómo podría ayudarte, ponte en contacto conmigo y te explicaré todo lo que necesites saber encantada.