¡Feliz jueves a todos!
Tras las vacaciones, están siendo unas semanas muy intensas de trabajo, ¡no puedo estar más contenta! Pero como os prometí por instagram, he sacado un ratito para compartir con vosotros esta receta de hojaldre de espinacas y huevo duro que, siempre que tengo invitados en casa, ¡nunca falla!
No te voy a engañar, lo ideal en esta receta es que la masa de hojaldre fuera casera para que la receta tuviera mayor valor nutricional. Pero la verdad, yo no le voy a dar tanta importancia a algo que es tan poco habitual que no va a interferir de forma negativa en mi alimentación 🙂
Esta receta de mi madre que, ¡cocina de maravilla! Así que, seguro que a ella también le hará mucha ilusión saber lo muuuucho que te ha gustado cuando la pruebes.
Una vez más, gracias por interesarte por mis contenidos y mis recetas. Gracias a ti, ¡esto vale mucho la pena!
Pues, ¡vamos al lío! ¿no? Sigue leyendo y toma nota de lo que necesitas. También puedes beneficiarte de recibir algunas recetas suscribiéndote a mi newsletter, además de compartir contigo novedades y promociones.
Ingredientes:
Para varias raciones (yo la hago para 6-8 personas):
- Hojaldre. Yo compré un paquete de hojaldre fresco que venían 2 placas de 520g en total.
- 1 kilo de espinacas frescas.
- 4 huevos cocidos.
- 1 huevo batido.
- 2 puñados de pasas.
- Ajo en polvo.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Una pizca de sal.
Elaboración:
- Saltear las espinacas a fuego medio en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra, ajo en polvo y una pizca de sal.
- Cuando las tengas todas salteadas, ponerlas en un escurridor para que suelen bien el agua y así que no nos quede el hojaldre demasiado húmedo.
- Cortar en trozos pequeñitos los huevos cocidos y reservar.
- Con la ayuda de un rodillo, estirar ligeramente la masa de hojaldre. Yo esto lo hago básicamente para que quede un pelín más grande. Pero no la estires mucho para que no se rompa.
- Encender el horno a 180 grados.
- Ponemos una placa de hojaldre sobre papel vegetal en la bandeja del horno y extendemos las espinacas. Que queden bien repartidas y estiradas.
- Por encima de las espinacas, repartimos las pasas y los trocitos de huevo duro.
- Ahora viene el momento más «delicado» para mi, poner la tapa encima. Tienes que hacerlo con cuidado para que te encajen bien las dos.
- Con la ayuda de un tenedor, aplasta bien los bordes para que cuando se hornee no se abra por los lados.
- Con el huevo batido, pintamos el hojaldre por encima y por los lados para que quede un poquito más crujiente.
- En mi horno lo tuve 25 minutos a 180 grados. Pero lo ideal sería que no lo perdieras de vista y, cuando veas que por encima está doradito, entonces apagar el fuego y sacarlo.
- Para cortarlo en porciones, te recomiendo que lo dejes enfrían un buen rato (yo lo dejé enfriar lo menos 3 horas antes de la cena). Pero se puede comer caliente, ¡al gusto de cada uno!
¡Estoy deseando ver ya tu resultado! ¡Seguro te queda genial!
¡GRACIAS POR LLEGAR HASTA AQUÍ!